Sala 1 Historia de la brujería
La brujería es un tema presente tanto en la antigüedad, en el medioevo, como en el renacimiento, y en el barroco, pero no podemos hablar de conjunto ya que cada época impone su sello característico. En el siglo XV aproximadamente ya se definirá el tipo de la bruja malvada, a la corrupción, teniendo como compañía al demonio. También en este siglo se termina de configurar la idea de la secta de brujas, los ritos.
Sala 2 Origen de la brujería
Cuando imaginamos en las brujas maléficas, malolientes y demoníacas de nuestro siglo, las pensamos de igual modo para la edad media.
La imagen actual que tenemos de la bruja fue elaborada definitivamente
en forma tardía. Esta visión se configura alrededor de los siglos XV y
XVI.
La visión que tenemos de la edad media es de una época oscura, conflictiva y de una crisis continua. En la edad media
la brujería y la demonología alcanzarán nuevas dimensiones a la merced del
espíritu de crisis que se estaba viviendo. Esta repentina aparición del
tema no tiene que ver con más cantidad de brujas en el mundo sino con la
crisis material y espiritual que se vivía. Se buscan culpables y así se
iniciará más tarde las persecuciones por parte de católicos y
protestantes.
Sala 3 Estudio de la brujería
Por otro lado el estudio de la brujería desemboca en
la problemática relacionada con la mujer. La bruja en contraposición
con el mago - éste crea la realidad - la maneja, se sirve de la
realidad.
Sobre la teoría de la magia nos habla
Caro Baroja y nos lleva a compararla con cinco elementos. Distingue
entre magia y nivel cultural, magia y teoría antropológica, magia y
religiones clásicas, magia y demonología, y magia y cristiandad. Nos da
las explicaciones referentes a la actitud de las diferentes clases
sociales antes la figura de los magos y la misma magia.
En
cuanto a la teoría antropológica nos explica como se ha tomado la
palabra “Magia” en distintos pueblos europeos, desde la antigüedad. Hubo
desde siempre ciertas pasiones que han movido a los hombre a acercarse a
lo desconocido, a ciertas fuerzas naturales que satisfagan su deseo en
forma inmediata. Éstos hombres hacían entrega de una parte de su ser o
de la totalidad de éste. Estas potencias sobrenaturales a veces son
malignas y otras no.
¡Esto ha sido todo amigos adiós!
Buen trabajo Álvaro.
ResponderEliminar¡ Genial ! Me encanta tu blog
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